Fácil ser feliz con tan poco.
Un marco de madera de la misma medida que el bastidor.
Papel de fieltro, polyester o sintético.
Una batidora eléctrica, por cierto, esta es una reliquia
que me acompaña hace ya 2 décadas...es una campeona!
Hidratamos en cubeta y batimos papel celulósico (reciclar es sano)...
Folios, cartulina, diario...
Obtenemos pasta celulósica...más saturado papel más grueso,
más diluido en agua, papel más fino.
Introducimos el conjunto bastidor-marco en vertical.
Volteamos en horizontal recogiendo pasta.
Dejamos escurrir de agua.
Retiramos el marco.
Preparamos el papel de fieltro o sintético sobre una bandeja.
Abatimos sobre el mismo de manera que la pasta celulósica
vaya a depositarse sobre el papel sintético.
De esta manera...movimiento rápido y seguro.
Ahora vemos el reverso del bastidor.
Presionamos enérgicamente por toda su superfície y retiramos
el bastidor.
Ya se observa la lámina de papel.
Retiramos el exceso de agua de la bandeja.
Retirada la lámina una vez seca del papel sintético, he
aquí el resultado: papel reciclado y de uso artístico; acuarelas
, gouache, crílico,...etc.
La pasta celulósica puede teñirse en fresco con
tintes al agua. obteniendo resultados diferentes y
sugerentes.
Otro ejemplo.
AHORA A PINTAR!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!.
Poco cuesta ser feliz con las pequeñas cosas.